viernes, 24 de agosto de 2012

Camino de Santiago en León


Mi buen amigo Luis se vino hace unos días a León, desde Sevilla, para peregrinar hasta Santiago de Compostela en bicicleta. Esta visita, además de darme mucha alegría, me sirvió para conocer y constatar diferentes hechos:

- El buen ambiente que hay por el Barrio Húmedo vinculado al Camino: un montón de peregrinos (identificables por las chanclas y el andar irregular).

- Que la Plaza del Grano está de lo más agradable, con las terrazas.

- Que Casa Benito sigue teniendo un suelo muy hermoso, labrado por el tiempo.

- Que el de La Bicha está en plena forma, tanto por los productos como por las broncas y admoniciones que reparte a quien lo merece.

- Que el servicio de información y turismo de la ciudad es realmente cutre: la oficina, situada en la plaza de la Catedral, cierra con absoluta rigidez a las ocho de la tarde, hora en la que la calle está repleta de turistas.

- Que las monjas de las Carbajalas se han subido al carro de la codicia (no sé si estaban ya subidas, desconozco todo de estas señoras y sus ecónomos). Resulta que visitamos el albergue de Las Carbajalas de la plaza del Grano (para coger una compostela, el pasaporte que es sellado a lo largo del Camino), donde se alojan los peregrinos por cinco euros la noche. Desde que el ayuntamiento cerró sorpresivamente el suyo a principios de  verano, éste se convirtió en el único lugar donde se acogía masivamente a los viajantes, con lo que su éxito estaba asegurado, pero...una residencia universitaria muy cercana decidió también dar este servicio durante el verano, a un precio superior. El hecho es que los peregrinos llegan, preguntan, y se les dice que el albergue está completo, pero que pueden dormir en el suelo (algo prohibido), sin informarles de que existe un albergue en las cercanías. Eso sí: a los del suelo, les cobran lo mismo que al resto.

No se trata de gente que llega a las diez de la noche, sin otra posibilidad de alojamiento: esto lo vimos a las seis de la tarde.

Mi amigo Luis llegó sano y salvo, después de darse la paliza, y encantado de la experiencia.


 Luis, a punto de iniciar el camino

No hay comentarios:

Publicar un comentario