Al vecino de la esquina izquierda le gusta tener una pantalla vegetal delante de la ventana, que da frescor y atrae a los pajaritos; al de al lado no le molesta el seto, pero no quiere que le tape las vistas; el siguiente tiene la misma sensibilidad que el de la esquina, y es todo lo contrario del de más allá, que odia la vegetación y no la quiere ni debajo de su ventana. Al del otro extremo de la puerta también le gustan las masas boscosas.
¡Jardinería al gusto!
¡Jardinería al gusto!
La publicidad de este edificio seguro que incluía la posibilidad de elegir la vegetación que quería ante su ventana.
ResponderEliminarEs que está la cosa "mu mala, mu mala pa vender un piso".