No sé si acabaré convirtiéndome en el clásico pelmazo obsesionado con su monotema, pero es que es difícil sustraerse a la agresión permanente de esta ciudad contra sus árboles. No acabo de comprender cómo puede mostrarse tan poca sensibilidad, tanta indiferencia, o tanta hostilidad, contra las escasas expresiones de vida silvestre que hay en nuestras ciudades, un medio cementado y asfaltado hasta la saciedad.
En el mes de marzo comenzaron unas obras al norte de la ciudad, junto al río, promovidas por la Confederación Hidrográfica del Duero (incluyeron, como no podía ser de otra manera, la limpieza casi total de la vegetación de las riberas del río, quitando todo eso que se suele llamar "maleza"). Por la orilla izquierda pusieron una valla, y se les ocurrió colocarla siguiendo una hilera de árboles, sin dejar la más mínima distancia. Ya entonces saqué un par de fotos para contarlo aquí, que pongo a continuación.
Por culpa de la campaña electoral el tema quedó aparcado. Dos meses después, mis temores se confirmaron: este es el efecto del vallado sobre los árboles.
Las obras se retirarán, y los árboles quedarán heridos.
Otra: ya contamos aquí las podas a destiempo que se hicieron en el Paseo de la Condesa. Luego siguieron en las moreras del Paseo de Salamanca, con las hojas ya brotadas, consiguiendo que para este verano tengamos unos árboles raquíticos, sin apenas sombra.
Ya entonces se malograron algunos nidos (que yo viera, gracias al aviso de un vecino, al menos uno de paloma torcaz, en el que antes de que llegaran los operarios ya estaba la pareja nidificando). Pero es que siguen insistiendo: en plena época de cría están podando los grandes chopos del Paseo de Salamanca. Y las denuncias caen en saco roto.
Para colmo, el futuro alcalde ha advertido que dedicará sus primeros cien días a "adecentar" el mobiliario urbano y jardines. Recordando cómo se las gastaban las corporaciones del PP, con la eliminación total de la vegetación de la ribera del Bernesga, es para echarse a temblar.
es una verdadera pena...
ResponderEliminarPrecisamente León tiene un mobiliario urbano y jardines muy decentes.
¡Que los dejen en paz, hombre!! que pena...
¡Qué desastre!
ResponderEliminar¿Será posible que por lo menos, ¡POR LO MENOS!,los políticos de esta parcela no tengan conciencia.
En mi barrio les ha dado por echarles caucho de colores y prometo que no son visiones "de colores".
ResponderEliminar¡¡Tengo miedo!!
Un abrazo utópico, Irma.-
Cárceles para los árboles, como muestran tus fotos, barrotes a los troncos, alambre a sus hojas...Te necesitan!!!
ResponderEliminarJose Luis, muy fuerte lo que están haciendo con los árboles. Hay que denunciarlo. Los de la inmaculada, sino me equivoco los acaban de podar salvajamente con corta de ramas incluida.
ResponderEliminarAunque sea habrá que poner una queja al Procurador del Común.
¿Tendrá que ver con la privatización de jardines?