Estoy convencido, absolutamente convencido, de que los niños y niñas que asistan a la guardería pública Santa Susana sentirán de mayores una aversión clarísima a las pintadas, los botellones descontrolados y otras muchas expresiones vandálicas. Imposible que sea de otra manera educándose en ese lugar.
En Santiago de Compostela.
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¿Tú crees?, a veces se da el resultado contrario al que cabía esperar.
ResponderEliminarPrecioso el sitio!! Aunque estoy de acuerdo con Tracy... iwal depende mas de lo a gusto que se sientan ahí... Si no les gusta la guarde, acabarán por aborrecer las pareces blancas...
ResponderEliminarPensando a cerca de las pintadas, si tantas ganas hay de intervenir la calle (y hacerla algo menos ajeno). En lugar de prohibir quizás sería mejor promover! El otro día vi en un parque infantil que los niños habían pintado parte del camino con tiza... y quedaba estupendamente!
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ResponderEliminarLa guardería sin duda preciosa, pero...por donde suben los cochecitos y las silla de los bebés? y las niñas y niños con sus abuelas septuagenarias? ?...(Pido disculpas por mi deformación profesional)
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